Categoría: Arquitectura religiosa > Iglesia
Distrito: Évora > Mora > Brotas
La Iglesia de Nossa Senhora das Brotas se sitúa en el corazón de la pequeña localidad de Brotas, en el municipio de Mora. Su presencia fue el motor del crecimiento de este poblado a lo largo de los siglos.
El área frente y alrededor de la iglesia presenta una configuración particular, moldeada por la historia de la intensa afluencia de peregrinos. Las construcciones que flanquean el patio frontal, conocidas como "Barroca de Nossa Senhora de Brotas", fueron antaño hospederías destinadas a acoger a los romeros, confiriendo a su entorno un ambiente histórico distintivo.
La historia de la Iglesia de Brotas está profundamente ligada a una antigua leyenda, transmitida de generación en generación. Se cuenta que, alrededor del siglo XV, la Virgen María se apareció a un pastor en este lugar.
Según la tradición, una vaca del pastor cayó por un barranco. Al intentar socorrerla, la Virgen surgió y pidió que se erigiera un templo en el lugar. La leyenda afirma que la propia Señora talló una pequeña imagen de sí misma en el hueso de la vaca, que milagrosamente se recuperó. Esta aparición y el milagro subsiguiente motivaron la construcción de una pequeña ermita inicial, que dio origen al actual santuario.
Comenzando como una modesta ermita en el siglo XV, la fama de la imagen de Nossa Senhora das Brotas pronto atrajo a numerosos peregrinos, convirtiéndose en uno de los principales centros de devoción en el Alentejo.
Este afluencia llevó a la necesidad de ampliar el templo a lo largo de los siglos siguientes e impulsó el desarrollo del propio poblado. A mediados del siglo XVI, la iglesia obtuvo independencia eclesiástica y se convirtió en la sede parroquial, reforzando su importancia. La intensa peregrinación llevó a la construcción de edificios de apoyo, concretamente las hospederías erigidas por las diversas cofradías de varias partes del país, cuyas marcas aún se pueden observar en algunas fachadas circundantes.
Aunque la escala de la peregrinación ha disminuido con el tiempo, la iglesia mantiene su papel central en la comunidad como iglesia parroquial, siendo un testimonio vivo de la fe y la historia de la región.
El edificio de la Iglesia de Nossa Senhora das Brotas refleja su larga historia constructiva, presentando una fusión de estilos que resultó de varias campañas de obras entre los siglos XVI y XVIII. Es posible identificar elementos góticos tardíos, barrocos y neoclásicos en su estructura.
Al recorrer el interior, se nota la bóveda nervada en la capilla mayor, herencia del gótico, que contrasta con la bóveda de cañón en la nave. Las capillas laterales, el coro alto y la sacristía completan el espacio interior. En la fachada principal, además de la torre campanario, destaca un inusual altar exterior, pensado para acoger a las multitudes de peregrinos en los días de mayor afluencia.
Uno de los aspectos más notables de la iglesia es la extensa y rica colección de azulejos que revisten gran parte de las paredes interiores. Estos paneles, datados entre los siglos XVI y XVIII, constituyen un importante conjunto artístico y decorativo, contando historias y llenando el espacio con color y detalle.
Por su valor, el conjunto fue clasificado como Inmueble de Interés Público.
La importancia histórica del Santuario de Brotas trascendió fronteras, reflejándose en la toponimia de lugares distantes, concretamente en Brasil y la India, donde la devoción a Nossa Senhora das Brotas dejó su marca.
A pesar de los cambios a lo largo de los siglos, la conexión de la comunidad y de los visitantes con la iglesia se mantiene fuerte. La tradición de honrar a Nossa Senhora das Brotas se perpetúa anualmente con las fiestas que se celebran el segundo fin de semana de agosto, manteniendo vivo el espíritu de este histórico centro de fe.
Licencia: https://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/deed.pt
Coordenadas DD: 38.870321012236964, -8.153570293980515
Coordenadas DMS: 38°52'13.2"N 08°09'12.9"W